Aventuras a caballo

Sabías que… soñar con montar a caballo significa deseo de independencia y libertad
Con esta actividad compensamos
1 kg de CO2

Descripción

Cabalgar ha sido una forma de transporte milenaria y hace referencia a cómo el hombre se mueve sobre el lomo de un caballo. El elemento diferenciador de la actividad de montar a caballo es la interacción con el animal. Cuanto más se practica, mayor coordinación se consigue, lo que implica para las diferentes marchas (paso, trote o galope) una acción permanente de abdominales, espalda, glúteos y piernas. Además de un sentido especial del equilibrio y autoestima que se produce al comprobar que el caballo responde a las ayudas del jinete.

Montar a caballo favorece nuestra confianza, control de nuestras emociones y mejora nuestra autoestima al sentir que conseguimos, mediante nuestras ayudas, tener bajo control al animal.

Requerimientos

No requiere ninguna condición previa.

Recomendaciones

Ropa y calzado cómodo y actitud abierta a experimentar y divertirse.

Calendario

Primavera, verano y otoño

Duración

Dependiendo de la modalidad escogida, paseos de una o dos horas, o excursiones que duran todo el día.

Que incluye

Todo el material necesario para llevar a cabo la actividad.

Ubicación

La actividad comienza desde la hípica el Paso a Nevá.

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Dirigido a:
Escuelas
Familias
Grupos
Empresas
Actividad accesible
Actividad inclusiva
Beneficios:
Bienestar
Desconexión
Salud
Con esta actividad contribuyes a:

Precio

A consultar según las fechas y el número de personas

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FAQS

¿Por qué montar a caballo?

Es una actividad que te carga de energía positiva, te mantiene en forma, te ayuda a superarte, mejora tu estado físico y anímico y es divertido, especialmente si te gustan los animales en general y los caballos en especial . Te permite disfrutar, en compañía de tu familia, amigos o compañeros de trabajo, de la naturaleza practicando un deporte al aire libre.

Montar a caballo es una actividad muy completa con un sinfín de beneficios:

  • Te acerca a la naturaleza. Facilita el fomento y respeto por los animales y el medio ambiente. Aumenta el sentido de responsabilidad, ya que el caballo es un ser vivo que debe respetarse y cuidarse.
  • Es una actividad que no hace distinciones de género. Niños y niñas compiten en las mismas condiciones y en las mismas pruebas.
  • Se puede practicar en familia y en todas las edades.
  • Favorece la corrección postural
  • Ayuda a mantener la forma física y el tono muscular
  • Aumenta la capacidad respiratoria y fortalece el corazón
  • Desarrolla la coordinación motriz
  • Mejora la concentración
  • Desarrolla el respeto, la paciencia y el autocontrol.
  • Potencia la intuición, la comunicación, la confianza y la autoestima.
  • Estimula la coordinación psicomotriz, el equilibrio, la armonía y la estética.
  • No es necesario tener mucha fuerza muscular, sino sensibilidad, por eso puede abrir posibilidades a personas poco dotadas físicamente.
  • Desarrolla valores como la responsabilidad, el respeto, la compañía.

Esta actividad, la pueden practicar personas de todas las edades, te permite estar en contacto con la naturaleza con compañía estableciendo una relación pura y honesta con un caballo y… ¡olvidarse de todo por un rato!!

¿Qué beneficios psicológicos obtienes al montar a caballo?

Los caballos son animales sociables y extremadamente sensibles. El cerebro de los caballos funciona en algunos aspectos, de forma similar a la mente humana, ha evolucionado para permitir sobrevivir en su posición de presa frente a los predadores.

Experimentan emociones como es el miedo, que les permite reaccionar de forma instantánea, haciendo uso de lo que se llama “el instinto de fuga”, ante lo desconocido o ante una situación que asusta, lo que les permite alejarse rápidamente del peligro. Cuando vemos un caballo alterado, debemos entender que está así porque está experimentando miedo, y no por manifestar agresividad.

Los caballos son muy sociables, por tanto necesitan estar en relación y contacto con otros caballos o con seres humanos. El caballo disfruta de tu compañía.

Mediante la interacción con los caballos, el humano es capaz de experimentar beneficios psicológicos a partir de un acercamiento a estos animales, sobre todo si realiza una actividad como montar a caballo.

  • Estar en contacto con el caballo favorece la confianza, el autocontrol de las emociones y también mejora la autoestima. Ayuda a regular también los niveles de estrés.
  • Mejora la concentración, la capacidad de atención y, por tanto, repercute de manera positiva en la memoria.
  • Que el animal esté bajo nuestro control ayuda a mejorar en la capacidad de atención e inculcar sentimientos como el respeto y la responsabilidad.
  • Proporciona nuevos conocimientos.
  • Favorece la ubicación en el espacio y en el tiempo.
  • Ayuda a la socialización con otras personas, ya que este tipo de actividad se realiza en grupo a menudo.
  • Favorece la conexión empática, desbloqueando trabas psicológicas.
  • Aumenta la cantidad de endorfina que produce el organismo, lo que ayuda a disminuir la depresión y generar grandes sentimientos de alegría y de distensión.

Practicar la actividad de montar a caballo, nos da múltiples beneficios que son muy útiles para resolver problemas de la vida moderna.

Montar un caballo es terapéutico y nos llenará de gozo. Al mismo tiempo, es una excelente forma de disfrutar paisajes maravillosos teniendo contacto con la naturaleza y con un maravilloso animal

Lo que debes saber si es la primera vez que montas a caballo?

Un jinete principiante puede sentirse como un saco de patatas en la silla de montar, pero mantener la posición correcta requiere cierta fuerza. Al pulsar el caballo para cambiar su forma de andar se trabaja la parte interna de los muslos, mientras que al sentarse alto y derecho a la silla de montar se utiliza la espalda, los abdominales y las piernas.

Vístete correctamente
Utiliza pantalones largos para proteger las piernas de las rozaduras contra la silla y zapatos cerrados con un talón pequeño para evitar que los pies salgan de los estribos. Evita la ropa que pueda enredarse con el equipo, incluyendo bufandas, tiras delgadas de la camiseta sin mangas y suéteres o camisas largas y sueltas.

Familiarizate con tu caballo
Llega al menos 15 minutos antes de la hora para conocer a tu nuevo compañero. Al encontrarse con un caballo por primera vez, manténgase siempre delante y, si es posible, hacia la izquierda. Los caballos tienen el cerebro pequeño, y están entrenados para esperar a la actividad humana (guiar, ensenar, montar) desde el lado izquierdo. ¿Por qué? Antiguamente los soldados llevaban espadas en las caderas izquierdas, si intentaban subir al caballo desde la derecha, acababan sentados sobre sus armas.

Sigue al líder
Al liderar un caballo, ponte a la izquierda de la cabeza y sosten las largas correas de cuero, llamadas riendas, con la mano derecha bajo la barbilla y con la mano izquierda un poco más abajo de la longitud de las riendas porque no se arrastran por el suelo.

Escucha
Antes de sentarse en la silla, cada jinete novel debe saber un poco sobre cómo ven el mundo los caballos. Todos los caballos, incluso los mejor entrenados, son por naturaleza animales de presa y están genéticamente predispuestos a correr cuando sienten el peligro. Por eso, siempre es una buena idea acercarse a un caballo con confianza desde la frente, hablar en voz baja y tranquila, y evitar los movimientos repentinos o ruidos.

Subirse al caballo
Subirse a un caballo sin ayuda puede ser difícil, así que busca un soporte. Cuando el soporte esté colocado en el lado izquierdo del caballo, coloca las riendas sobre la cabeza del caballo. Pega el dedo del pie izquierdo en el estribo, (la parte metálica que cuelga del sillín). Sosten las riendas en la mano izquierda, apoyándolas en la parte delantera de la silla. Pon la mano derecha en la parte posterior de la silla de montar y levántate suavemente hacia arriba, balanceando la pierna derecha con cuidado sobre el dorso del caballo. Cuando una pierna esté a cada lado del caballo, siéntate suavemente en la silla y coloca el pie derecho en el estribo derecho.

Empezar el paseo
La mayoría de los caballos tienen 3 pasos progresivamente rápidos: andar, trotar y galopar. El paseo es la forma de andar más firme porque el caballo siempre tiene al menos un pie en el suelo. Para dominar el paseo, es importante relajarse en la silla y moverse con el caballo. Tienes que sentirte alto, con los hombros rectos, los talones hacia abajo en los estribos, y los ojos enfocados hacia delante entre las orejas del caballo. Esta posición es la más estable y cómoda tanto por el caballo como por el jinete.

Frenar al caballo
Para dirigir y detenerse, utiliza las riendas, que se conectan a la parte metálica de la boca del caballo. Siempre ten cuidado con las riendas, ¡imagínate lo incómodo que sería sacudir por la boca! Tienes que sostener las riendas una en cada mano, con los pulgares en la parte superior. Ambos brazos deben formar ángulos rectos en el codo, con los antebrazos siguiendo la línea de la rienda. Para girar a la izquierda, mueve la carrera izquierda hacia la izquierda en un movimiento como si estuvieras abriendo una puerta. Para mover bien la cabeza del caballo, haz el mismo movimiento con la rienda derecha. Para detenerte o disminuir la velocidad, tira suavemente de las riendas mientras te sientas arriba y empuja los talones hacia abajo. Aunque sea difícil, intenta resistir la tentación de inclinarte hacia atrás y gritar.

Trotar con el caballo
Para decirle al caballo que pase del paseo al trote (el siguiente paso más rápido), aprieta suavemente los lados del caballo con el interior de las piernas. Si esto no hace que las cosas se muevan, da al caballo una patada suave con los talones. Una montura estable es la clave para evitar que salga del sillín. Se sienta profundamente, presiona estas piernas hacia abajo y mantén la espalda alta y recta (pero no rígida).

Galopar
¿Listo para mayor velocidad? El galope es la marcha más rápida utilizada en la mayoría de las cabalgatas recreativas. El galope es más adelante-atrás que de lado a lado, por lo que a menudo se compara con un caballo de mecedora. Para esta marcha, siéntate profundamente y añade presión con las dos piernas mientras mantiene la espalda recta y alta para evitar caer hacia delante.